Una voz para muchas… que ya no puede sostenerse sola

He salvado vidas con mi historia.

Hoy necesito que alguien me ayude a sostener la mía.

Mi nombre es Catalina, pero muchas me conocen como Catrussh.

Soy sobreviviente de abuso sexual infantil por parte de mi padre y mi hermano. Crecí con una madre narcisista que nunca me protegió. Desde entonces, la vida me ha enseñado a sobrevivir sin red, sin respaldo, sin un lugar seguro al que volver.

Y aún así, decidí hablar.

He dedicado los últimos años de mi vida a romper el silencio.

He compartido mi historia en conferencias, redes sociales, entrevistas, escuelas y comunidades que necesitan escuchar verdades que el mundo prefiere callar.

He acompañado a otras personas en su proceso de sanación.

He invertido todo: mi alma, mi cuerpo, mi tiempo… y también mi dinero.

Llevo décadas pagando mis terapias. Años formándome profesionalmente.

Y años más sosteniendo este trabajo sola.

No tengo una organización detrás.

Nadie me cubre los viajes, los traslados, las sesiones, los días sin ingresos.

Y aunque muchas veces me invitan a hablar, aún en esos espacios no se reconoce el valor real de los sobrevivientes.

Aun así, lo he hecho.

Porque gracias a esta voz, maestras han podido identificar casos de abuso en sus aulas.

Porque madres han descubierto verdades que sus hijos no podían nombrar.

Porque muchas personas han encontrado, en mis palabras, el coraje para romper el silencio.

Pero hoy ya no puedo más sola.

He recibido promesas que no se cumplieron.

Mi familia me volvió a excluir.

Y la sensación de abandono se ha vuelto insoportable.

Esta campaña no es por caridad.

Es por justicia.

Es por la dignidad de una causa que ha sostenido a muchas, pero que ya no puede seguir si nadie la sostiene a ella.

Si alguna vez mi historia te tocó, te sostuvo o te abrió los ojos…

hoy te pido que me ayudes a seguir caminando.

Para que mi voz —que es también la de muchas— no se apague en el desierto.

Gracias por no callar conmigo.

I’ve saved lives with my story.

Today, I need someone to help hold mine.

My name is Catalina, but many know me as Catrussh.

I’m a survivor of childhood sexual abuse at the hands of my father and my brother.

I grew up with a narcissistic mother who never protected me.

Since then, life has taught me how to survive without a safety net,

without support,

without a place to return to.

And still, I chose to speak.

I’ve dedicated the last years of my life to breaking the silence.

I’ve shared my story in conferences, social media, interviews, schools, and communities that need to hear the truths the world prefers to bury.

I’ve walked alongside others in their healing.

I’ve invested everything—my soul, my body, my time… and my money.

I’ve paid for decades of therapy.

I’ve trained professionally for years.

And for even longer, I’ve carried this mission alone.

I don’t have an organization backing me.

No one covers the travel, the transport, the sessions, or the days with no income.

And even when I’m invited to speak, the true value of survivors is still often unseen.

Still, I’ve done it.

Because through this voice,

teachers have identified abuse in their classrooms.

Mothers have uncovered truths their children couldn’t name.

And many people have found the courage to break their own silence in my words.

But today, I can’t keep doing this alone.

I’ve received promises that were never kept.

My family has once again shut me out.

And the feeling of abandonment has become unbearable.

This campaign is not about charity.

It’s about justice.

It’s about honoring the dignity of a mission that has held so many—

but cannot continue unless someone holds it now.

If my story ever touched you, held you, or opened your eyes…

today I ask you to help me keep walking.

So that my voice —which is also the voice of many—

doesn’t vanish in the wilderness.

Thank you for not staying silent with me.

Romper el silencio cuesta. Pero callar cuesta la vida.

Somos Catalina Gonzalez y Alicia Markowitz , dos hermanas nque se eligieron en la misma vision y mision, terapeutas, activistas y sobrevivientes de abuso sexual y psicopático dentro de nuestro propio hogar.

Este junio, fuimos invitadas a hablar en los Premios BienFest en Guadalajara, donde por primera vez se abrirá un espacio para hablar del trauma familiar, el abuso sexual infantil y el silencio generacional desde una mirada científica, espiritual y encarnada.

Iremos en nombre de muchas personas que aún no pueden contar su historia.

No vamos como influencers. Vamos como sobrevivientes que transformaron el dolor en misión.

¿Por qué pedimos ayuda?

Porque no tenemos los recursos para cubrir este viaje.

Porque llevamos más de un año autofinanciando nuestras acciones, nuestros viajes, nuestras conferencias y cada contenido que creamos con amor y compromiso.

Y porque no queremos rendirnos justo ahora.

¿Cómo usaremos tu aporte?

Desglose del viaje de 7 días a Guadalajara (dos personas):

Estadía (hotel seguro): $600 USD

Transporte (vuelos y traslados): $1000 USD

Alimentación (7 días): $600 USD

Logística, materiales, movilidad e imprevistos: $300USD

TOTAL: $2,500 USD

✊ Este viaje no es turismo. Es resistencia.

Es llevar la voz de miles de niñas y niños que aún viven bajo el mismo techo que sus agresores.

Es decir lo indecible en un escenario donde nunca antes se ha dicho.

Es representar a una generación de sobrevivientes que ya no quiere callar.

Gracias por ayudarnos a llegar.

Gracias por creer que nuestras voces merecen espacio.

Gracias por ser parte de esta misión junto a Fundación SOLAS.

Catalina Gonzalez y Alicia Markowitz

@catrussh & @______

Fundadoras de Fundación SOLAS

Breaking the silence comes at a cost.

But staying silent costs us our lives.

We are Catalina Gonzalez and Alicia Markowitz—two sisters who chose each other in the same vision and mission. We are therapists, activists, and survivors of sexual and psychopathic abuse that happened within our own home.

This June, we’ve been invited to speak at the BienFest Awards in Guadalajara, where, for the first time, a space will be opened to talk about family trauma, childhood sexual abuse, and generational silence—through a scientific, spiritual, and embodied lens.

We’re going on behalf of so many who still cannot tell their stories.

We’re not going as influencers.

We’re going as survivors who turned their pain into purpose.

Why are we asking for help?

Because we don’t have the resources to fund this trip.

Because we’ve spent over a year self-funding our actions, our travels, our conferences, and every piece of content we create with love and commitment.

And because we don’t want to give up—not now.

How will your contribution be used?

Breakdown of our 7-day trip to Guadalajara (for two people):

Lodging (safe hotel): $600 USD

Transportation (flights and local transfers): $1000 USD

Meals (7 days): $600 USD

Logistics, materials, local transport, emergencies: $300 USD

TOTAL: $2,500 USD

✊ This trip is not tourism. It’s resistance.

It’s bringing the voice of thousands of children who still live under the same roof as their abusers.

It’s saying the unspeakable on a stage where it’s never been said before.

It’s representing a generation of survivors who no longer want to remain silent.

Thank you for helping us get there.

Thank you for believing our voices deserve space.

Thank you for being part of this mission with Fundación SOLAS.

Catalina Gonzalez & Alicia Markowitz

@catrussh & @______

Co-founders of Fundación SOLAS