Hola, mi nombre es Jennifer, tengo 17 años y soy ciudadana estadounidense nacida en Chicago.

El jueves 16 de octubre de 2025, alrededor de las 11 de la mañana, mi mamá y yo salimos a comprar comida. Ella llevaba días sin trabajar ni salir de casa por miedo al ICE, pero ese día fue una necesidad, porque ya no teníamos comida en casa.

Mientras íbamos a la tienda, agentes del ICE nos detuvieron. Sin entender por qué, nos gritaron y nos subieron a la fuerza a una camioneta, de una forma agresiva y muy asustante.

Yo les dije que soy ciudadana estadounidense, pero aun así me subieron con mi mamá. Fue un momento lleno de miedo, confusión y dolor.

Después de un rato, nos separaron. A mí me llevaron a otro lugar distinto por ser menor de edad y, aunque no pudieron ponerme cargos, a mi mamá la subieron a otra camioneta y se la llevaron.

Pasé todo el día y la noche sin saber dónde estaba mi mamá, sin poder comunicarme ni recibir información.

No fue hasta el día siguiente por la mañana que mi mamá me llamó. Me dijo que estaba detenida en el centro de detención de Broadview.

Durante esa llamada, me contó que quiere pedir un abogado, porque desea quedarse en este país conmigo, ya que soy su única hija. Me dijo que no quiere dejarme sola y que hará todo lo posible por luchar para quedarse aquí.

Desde entonces no he podido verla. Estoy completamente sola, sin familiares cercanos ni apoyo.

Estoy tratando de mantenerme fuerte, pero necesito ayuda económica para poder pagar un abogado que represente a mi mamá y la ayude a pelear su caso.

Por eso estoy pidiendo el apoyo de todos ustedes.

Cualquier ayuda —una donación o compartir mi historia— significa muchísimo para mí.

Solo quiero reunirme con mi mamá y que podamos seguir viviendo juntas en este país.

Gracias por leer mi historia, por su tiempo y por cualquier ayuda que puedan brindarme.

Jennifer Jiménez