Support Uncle Marvin's Battle Against Bone Cancer

Hi everyone, my name is Kayla but many of you know me as Daniella. We're reaching out to you with heavy hearts and deep hope as we ask for support for our beloved Uncle Marvin, who is once again courageously battling bone cancer. My uncle was first diagnosed in 2010, and after a long, grueling fight, he beat it. A victory that filled our entire family with relief and gratitude. Sadly, the cancer has returned with greater severity, more aggressive than before, and it's taken a toll on his body. Despite his strength and the unwavering support of his loved ones, the medical team at his current hospital has told us they’ve exhausted their options and no longer have a hopeful outlook. But giving up is not in my uncles spirit, and it's not in ours either. We are working tirelessly to transfer him to a more advanced facility where he can receive specialized treatment, but the cost of this transition is overwhelming. My uncle is so much more than a patient, he’s an incredible father, a devoted son, a supportive brother, a loving uncle, and a loyal friend to so many. His kindness, wisdom, and humor have touched countless lives, and now we’re asking for help to give him the fighting chance he deserves. Any contribution, no matter how small, will go directly toward his medical expenses and give us hope in a moment when it’s needed most. Thank you for standing with us and God bless you all!

Hola a todos, mi nombre es Kayla, pero muchos de ustedes me conocen como Daniella. Nos acercamos a ustedes con el corazón apesadumbrado y profunda esperanza mientras pedimos apoyo para nuestro querido tío Marvin, que una vez más está luchando valientemente contra el cáncer de huesos. Mi tío fue diagnosticado por primera vez en 2010, y después de una larga y agotadora pelea, lo superó. Una victoria que llenó a toda nuestra familia de alivio y gratitud. Lamentablemente, el cáncer ha regresado con mayor gravedad, más agresivo que antes, y ha pasado factura a su cuerpo. A pesar de su fuerza y el apoyo inquebrantable de sus seres queridos, el equipo médico de su hospital actual nos ha dicho que han agotado sus opciones y que ya no tienen una perspectiva esperanzadora. Pero rendirse no está en el espíritu de mi tío, y tampoco está en el nuestro. Estamos trabajando incansablemente para trasladarlo a un hospital más avanzado donde pueda recibir tratamiento especializado, pero el costo de esta transición es muy costoso. Mi tío es mucho más que un paciente, es un padre increíble, un hijo devoto, un hermano solidario, un tío cariñoso y un amigo leal para muchos. Su amabilidad, sabiduría y humor han tocado innumerables vidas, y ahora estamos pidiendo ayuda para darle la oportunidad de luchar que se merece. Cualquier contribución, por pequeña que sea, irá directamente a sus gastos médicos y nos dará esperanza en un momento en el que más se necesite. Gracias por estar con nosotros y que Dios los bendiga a todos!