HAM!bite nació del deseo de construir algo propio desde cero, con esfuerzo, pasión y muchas ganas de salir adelante. Con muy poco capital y mucha determinación, decidí iniciar mi negocio de hamburguesas con un carrito que puse en marcha el 13 de noviembre de 2024.

En la Feria Nacional de San Marcos 2025, tuve la oportunidad de participar.

Gracias a dicho evento logré reunir capital para invertir en mi primer local físico, que abrió durante el verano de 2025. Sin embargo, el 5 de agosto de 2025, todo lo que había construido se fue en una explosión donde todo cambió de un momento a otro. El sueño que apenas comenzaba se vino abajo, y mi vida dio un giro inesperado.

A pesar de eso, el apoyo de la gente, de mis clientes, amigos y colaboradores, me hizo entender que HAM!bite no solo era un negocio, sino una comunidad donde hoy sigo adelante y agradecido por toda esa gente que ha apoyado este proyecto.

Más convencido que nunca de que los sueños se reconstruyen con el mismo amor con el que nacen. HAM!bite sigue vivo gracias a todas las personas que han creído en mí y en lo que representa este proyecto: esfuerzo, disciplina y resiliencia.

Quiero agradecer sinceramente a todas las personas que han mostrado su apoyo en estos momentos difíciles. Esta campaña tiene como propósito reunir los recursos necesarios para reparar todos los daños ocasionados por la explosión. Cada aportación y muestra de solidaridad nos acerca un paso más a recuperar lo perdido.

EUA

HAM!bite was born from the desire to build something of my own from scratch — with effort, passion, and a strong will to move forward. With very little capital but a lot of determination, I decided to start my burger business with a small food cart that I launched on November 13, 2024.

In 2025, I had the opportunity to participate in the San Marcos National Fair.

Thanks to that event, I was able to gather enough funds to invest in my first physical location, which opened during the summer of 2025. However, on August 5, 2025, everything I had built was lost in an explosion that changed everything in an instant. The dream that was just beginning suddenly collapsed, and my life took an unexpected turn.

Despite that, the support from the community — my customers, friends, and team — helped me realize that HAM!bite was not just a business; it was a community. Today, I continue to move forward, deeply grateful to all those who have supported this project.

I am more convinced than ever that dreams can be rebuilt with the same love they were born from. HAM!bite remains alive thanks to everyone who has believed in me and in what this project represents: effort, discipline, and resilience.

I want to sincerely thank all the people who have shown their support during these difficult times. This campaign aims to raise the necessary funds to repair the damages caused by the explosion. Every contribution and act of solidarity brings us one step closer to recovering what was lost.