Para transplante de riñón

Cecilia necesita vivir, no sobrevivir: ayúdala a vencer la insuficiencia renal

✨ Una historia real, una vida en pausa… que merece continuar.

Mi nombre es Teresa Pérez, y hoy escribo con el corazón en la mano. Soy madre de Cecilia Alexa Zelié Pérez, una joven valiente de 19 años que enfrenta una batalla silenciosa pero feroz contra la insuficiencia renal crónica. Esta enfermedad no solo ha detenido sus sueños, sino que la obliga a vivir conectada a una máquina tres veces por semana, durante horas, como única opción para seguir con vida.

Cecilia fue diagnosticada a los 14 años con síndrome nefrótico por glomeruloesclerosis segmentaria y focal, una enfermedad que atacó gravemente sus riñones. A los 18 años, sufrió una descompensación severa, con edemas y presión arterial elevada, lo que obligó a iniciar la terapia de hemodiálisis de urgencia. Desde entonces, su vida se resume en una rutina dolorosa, dependiente de tratamientos que desgastan no solo su cuerpo, sino también su alma.

Hoy, Cecilia está médicamente apta para recibir un trasplante de riñón. Sin embargo, lamentablemente, este no puede llevarse a cabo en su país debido a la falta de insumos y condiciones necesarias. Esta realidad ha destrozado nuestras esperanzas una y otra vez. Mientras tanto, su estado de salud se deteriora: anemia crónica, hierro alto, creatinina extremadamente elevada (995 umol/L), bajos niveles de hemoglobina y vitaminas esenciales. La situación es crítica.

¿Quién es Cecilia?

Cecilia es una joven dulce, noble, con una sonrisa hermosa, de esas que brillan incluso en los días más oscuros. Soñaba con ser enfermera y ayudar a otros. Hoy, lamentablemente, tuvo que abandonar sus estudios. Pero no ha perdido el deseo de vivir. Me dice constantemente:

“Mamá, yo no quiero vivir pegada a una máquina… quiero ser útil, trabajar, vivir como los demás.”

Ese deseo simple, pero tan poderoso, es lo que me lleva a pedirles ayuda. Como madre, ver a tu hija apagarse lentamente, sin poder hacer nada, es una de las formas más crueles del dolor.

Nuestra realidad

Vivimos en condiciones muy precarias. Nuestra casa tiene paredes agrietadas, el piso es de fibrocemento y no contamos con agua potable ni un sistema sanitario funcional. No tenemos ingresos fijos. Recibimos una pensión mínima por ser yo cuidadora, y no contamos con ningún otro tipo de ayuda. El padre de Cecilia está recluido, por lo que estoy sola con esta carga. A veces no sé de dónde saco fuerzas, pero no puedo rendirme por ella.

Además de la hemodiálisis, Cecilia necesita medicamentos que no están disponibles. Tampoco hay acceso constante a vitaminas, suplementos, ni análisis clínicos básicos debido a la falta de reactivos. Incluso sus últimos exámenes fueron retrasados por falta de recursos en el hospital.

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¿A qué destinaremos los fondos?

Con esta campaña, buscamos mejorar la calidad de vida de Cecilia y mantenerla estable mientras buscamos soluciones para su tratamiento definitivo. El dinero recaudado será utilizado en:

✅ Medicamentos, vitaminas, calcio, hierro y suplementos esenciales

✅ Alimentación especial y balanceada que su condición requiere

✅ Exámenes médicos de seguimiento y transporte a centros especializados

✅ Mejoras básicas del hogar (agua potable, higiene, cama adecuada)

✅ Y a largo plazo: gestiones para acceso a un trasplante renal

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La campaña incluye fotografías, recetas médicas, resultados de laboratorio y certificados clínicos que avalan esta historia real. Toda la información ha sido verificada.

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❤️ Cada segundo cuenta

Tu ayuda puede significar un nuevo amanecer para Cecilia. No hablamos solo de mejorar su salud, sino de darle motivos para seguir adelante, devolverle la esperanza, y permitirle vivir con dignidad. Aunque no puedas donar, compartir esta historia es una forma inmensa de ayudar.

Gracias por leer, por compartir, por contribuir. Que tu solidaridad regrese multiplicada. Cecilia tiene derecho a vivir. Y juntos podemos lograrlo.