In Loving Memory of Eduardo De La Rosa

I would like to thank you for your time in visiting this page.

Eduardo is survived by his wife of nearly 30 years, daughter, and two sons. He was the ultimate example of what it is to be a husband, father, uncle, brother, son, and friend.

In tough times such as these, there are not many ways we can show our support to his family, but one of them is financially. The Lord called him home unexpectedly (to us), but it was all in God’s perfect plan.

The De La Rosa family has never asked for anything other than prayers. We sincerely care about this family and wanted to start this page as an expression of our love towards them. We want to show our support towards them, and hope that this page can help them as they navigate this new chapter in their lives. Anything you can give is a blessing for this family, nothing will be taken for granted.

Anyone and everybody who met Eduardo was never the same. He left such an impact in all of our hearts. His legacy will live on forever.

This is not a “goodbye”, only a “see you later”.

Thank you

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Me gustaría agradecerle el tiempo que ha dedicado a visitar esta página.

A Eduardo le sobreviven su esposa de casi 30 años, su hija y dos hijos. Fue el máximo ejemplo de lo que es ser esposo, padre, tío, hermano, hijo y amigo.

En tiempos difíciles como estos, no hay muchas formas en las que podemos mostrar nuestro apoyo a su familia, pero si podemos aportar económicamente. El Señor lo llamó a casa inesperadamente (para nosotros), pero todo estaba en el plan perfecto de Dios.

La familia De La Rosa nunca ha pedido nada más que oraciones. Esto es puramente una iniciativa que nosotros, como amigos y hermanos en la fe, hemos comenzado para ayudar en esta transición hacia la nueva temporada en la que viven juntos como familia. Cualquier cantidad que pueda dar es una bendición para esta familia. Nada se dará por sentado.

Todos los que conocieron a Eduardo nunca fueron los mismos. Dejó tal impacto en todos nuestros corazones. Su legado vivirá para siempre.

Esto no es un “adiós”, solo un “hasta luego”.

Gracias