Helping to keep mom alive

Mi nombre es María Bandres, una venezolana que actualmente reside en Santiago de Chile. Hoy, me dirijo a todos ustedes con un corazón lleno de preocupación y necesidad, en un momento extremadamente difícil para mi familia y para mí. Mi madre, Carmen Muñoz, de 54 años, reside en San Juan de los Morros, Venezuela. El 25 de agosto, debido a un fuerte dolor abdominal, buscó ayuda en el Seguro Social de la ciudad. Lamentablemente, después de una primera atención, la enviaron de regreso a casa con un tratamiento que no alivió su dolor. Dos días después, debido a que su condición empeoraba, regresó al Seguro Social y fue ingresada. El diagnóstico inicial fue una "obstrucción intestinal". Estuvo bajo tratamiento durante cuatro días, pero su estado de salud continuó deteriorándose.

Finalmente, el 1 de septiembre, la trasladaron al Hospital Israel Ranuarez Balza en la misma ciudad. Fue intervenida de emergencia y se descubrió que en realidad tenía una "peritonitis", con la vesícula ya explotada, lo que causó una grave contaminación de todos sus órganos. Desde entonces, mi madre se encuentra en estado de coma inducido, luchando por su vida en la unidad de terapia intensiva. Durante este tiempo, ha enfrentado diversas complicaciones, como un derrame pulmonar, y su situación médica sigue siendo crítica. En Venezuela, el sistema de salud no proporciona las condiciones óptimas para sobrevivir a una situación tan grave. Todo, desde tratamientos hasta exámenes médicos y materiales, debe ser adquirido externamente, y esto ha generado una situacion que nos supero ya que no contamos con los recursos necesarios para poder costear dicha batalla.

En este momento, me dirijo a todos ustedes con la humilde solicitud de apoyo y solidaridad. Los gastos médicos y de manutención se han acumulado rápidamente, y estamos luchando para poder cubrirlos. Mi madre no puede salir de cuidados intensivos hasta que se estabilice su condición y se combata la infección en sus órganos. Después de eso, tendrá que someterse a cirugías y terapias respiratorias.

Agradezco de antemano su consideración y apoyo en este momento tan difícil para nuestra familia. Cada gesto de generosidad será una luz de esperanza y nada absolutamente es pequeño todo cuenta para este camino hacia la recuperación de mi madre. Asi como tambien sus oraciones y encomiendas a Dios, por mi madre y el compartir el presente para poder llegar a mas personas.

Con gratitud y Fe.

My name is María Bandres, a Venezuelan who currently resides in Santiago de Chile. Today, I refer to all of you with a heart full of concern and need, at an extremely difficult time for me and my family. My mother, Carmen Muñoz, 54 years old, lives in San Juan de los Morros, Venezuela. On August 25th, due to severe abdominal pain, she sought help from the city's Social Security. Unfortunately, after a first attention, she was sent back home with a treatment that did not alleviate her pain. Two days later, as her condition worsened, she returned to Social Security and was admitted. The initial diagnosis was "intestinal obstruction." She was under treatment for four days, but her health condition continued to deteriorate.

Finally, on September 1, she was transferred to the Israel Ranuarez Balza Hospital in the same city. She underwent emergency surgery and it was discovered that she actually had "peritonitis", with her gallbladder already exploded, which caused serious contamination of all her organs. Since then, my mother has been in an induced coma, fighting for her life in the intensive care unit. During this time, she has faced various complications, including a pulmonary effusion, and her medical situation remains critical. In Venezuela, the health system does not provide the optimal conditions to survive such a serious situation. Everything, from treatments to medical examinations and materials, must be acquired from other countries, and this has generated a situation that is beyond us since we do not have the necessary resources to be able to pay for this battle.

At this moment, I address all of you with a humble request for support and solidarity. Medical and living expenses have been piling up fast, and we are struggling to make ends meet. My mother cannot be released from intensive care until her condition is stabilized and the infection in her organs is combated. After that, she will have to undergo surgeries and respiratory therapies.

I thank you in advance for the consideration and support at this difficult time for our family. Every gesture of generosity will be a light in the tunnel of hope and absolutely nothing is small, everything counts on this road to my mother's recovery. As well as her prayers and her commendations to God, for my mother and sharing this post to be able to reach more people.

With gratitude and faith.