
Escuchar mejor, sueño posible. Hearing better, possibledream
Donation protected
¡Hola a todos!
Me llamo María Andrea Stone, tengo 31 años y vivo en México. Quiero compartir con ustedes mi historia y pedirles su apoyo.
Nací con sordera profunda bilateral y, desde muy pequeña, utilicé audífonos potentes. A pesar de los desafíos, logré rehabilitarme gracias al apoyo de mi mamá y terapias de lenguaje.

En 2011, mi audición empeoró, pero con mucho esfuerzo y gracias al apoyo de mis padres, tuve la suerte de recibir un implante coclear en mi oído derecho. ¡Fue un cambio radical! Pude escuchar sonidos que desconocía, conversar con mayor facilidad y mejorar mi calidad de vida.

Años más tarde, recibí un segundo implante en mi oído izquierdo, lo que mejoró aún más mi escucha espacial y equilibrio.
Los implantes cocleares son una tecnología maravillosa, pero requieren procesadores externos para funcionar. Estos dispositivos son delicados y necesitan mantenimiento regular.
Mi problema es que mi primer procesador externo ya está descontinuado y el segundo está a punto de dejar de tener soporte. Cada procesador cuesta alrededor de $14,000 USD, lo que está fuera de mi alcance económico.
Es por eso que les pido su apoyo. Los implantes y procesadores no solo mejoran mi audición, sino que me permiten conectarme con el mundo que me rodea. Sin ellos, me siento aislada y mi calidad de vida se ve gravemente afectada.
Cada donación cuenta, y se los agradeceré eternamente. ¡Gracias por leer mi historia y considerar su apoyo!"
"Hello everyone! My name is María Andrea Stone, I'm 31 years old, and I live in Mexico. I want to share my story with you and ask for your support.
I was born with profound bilateral hearing loss and have used powerful hearing aids since I was a baby. Despite the challenges, I was able to rehabilitate thanks to the support of my mom and language therapy. In 2011, my hearing worsened, but with great effort and thanks to the support of my parents, I was fortunate to receive a cochlear implant in my right ear. It was a radical change! I could hear sounds I didn't know, converse with greater ease, and improve my quality of life.

Years later, I received a second implant in my left ear, which further improved my spatial hearing and balance. Cochlear implants are wonderful technology, but they require external processors to function. These devices are delicate and require regular maintenance.

My problem is that my first external processor is already discontinued, and the second is about to lose support. Each processor costs around $14,000 USD, which is out of my economic reach.
That's why I'm asking for your support. The implants and processors don't just improve my hearing, but they also allow me to connect with the world around me. Without them, I feel isolated and my quality of life is severely impacted.
Every donation counts, and I will eternally appreciate it. Thank you for reading my story and considering your support!"

Organizer

Maria Andrea Stone Lopez
Organizer
Residencial Agua Caliente, Tijuana, BCN