CIENCASAS DESTROZADA POR LA DANA

Soy Jaume Navarro, y mi padre, junto a sus compañeros, trabajan en CIENCASAS, una inmobiliaria familiar que forma parte de Paiporta desde hace 25 años. La oficina está justo al lado del barranco, así que cuando llegó la DANA, el golpe fue tremendo. EN CUESTIÓN DE MINUTOS, el agua y el barro empezaron a invadir el lugar, poniendo en riesgo no solo años de esfuerzo, sino también a quienes estaban allí.

Con mucha suerte, mi padre y sus compañeros lograron llegar a salvo, aunque fue un momento de muchísima tensión para todos. Pese a las pérdidas materiales, estamos AGRADECIDOS DE QUE TODOS ESTÉN BIEN.

Este es un golpe fuerte, pero ellos siguen con las GANAS DE SIEMPRE, comprometidos en ayudar a la gente de Paiporta a encontrar su hogar y continuar siendo una parte activa de esta comunidad. PAIPORTA ES NUESTRA CASA y, aunque la DANA intentó detenernos, NO VAMOS A RENDIRNOS.

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I'm Jaume Navarro, and my father, along with his colleagues, runs CIENCASAS, a family real estate business that's been part of Paiporta for 25 years. The office is located right next to the ravine, so when the DANA storm hit, it was devastating. In just minutes, water and mud began flooding in, threatening not only years of hard work but also the safety of everyone there.

Thankfully, my father and his colleagues made it out safely, though it was an incredibly tense moment for everyone. Despite the material losses, we’re deeply GRATEFUL THAT EVERYONE IS OKAY.

This is a tough blow, but they’re moving forward with the SAME DETERMINATION as ever, committed to helping the people of Paiporta find their homes and staying a strong part of this community. PAIPORTA IS OUR HOME, and while the DANA tried to stop us, WE WON'T GIVE UP.