Carlos Reyes Garcia Funeral & Memorial Expenses

Mi padre, Carlos Reyes García, fue diagnosticado con insuficiencia hepática y renal cuando ingresó al hospital el 11 de agosto de 2022. Nos decían que había una pequeña posibilidad de que pudiera mejorar con los medicamentos que le dieron, pero también había una posibilidad de que no lo hiciera y solo le quedaran unos meses de vida. Básicamente, los médicos nos dijeron que era como tirar una moneda al aire y que solo Dios sabía si mi papá se recuperaría y volvería a la normalidad. Extraerían sangre y recolectarían análisis varias veces al día y todos los días cuando estaba en el hospital para ver como va su salud. Durante los varios días que Dios le permitió vivir, mi papá mantuvo su fe fuerte sin importar las aflicciones que tuvo que soportar. No perdería la esperanza, incluso con su pronóstico que no parece muy bueno. Estuve con mi papá durante todo su primer y último día en el hospital. Nunca dejaría solo a mi padre porque no quería que se sintiera solo en estos momentos difíciles y sabía que le encantaría estar acompañado en este tiempo de prueba. Me aseguraría de que mi papá entendiera lo que tenían que decir los médicos, qué medicamento se administraría y por qué motivo, qué procedimiento se tendría que realizar y su plan general para él todos los días. Me aseguraría de que mi papá durmiera lo suficiente, lo ayudaría a levantarse para ir al baño, lo ayudaría a recibir su fisioterapia diaria y lo ayudaría a alimentarlo con el desayuno, la cena y el almuerzo. Estuve a su lado en cada uno de los procedimientos de hemodiálisis que tuvo en el hospital para asegurarme de que se desarrollara sin problemas, me aseguré de que siguiera su restricción diaria de un litro de agua, traduje todo lo que no estaba seguro y lo ayudé a obtener respuestas a las preguntas que tenía. . Hubo numerosos días en el hospital en los que pasaba días sin dormir porque estaba todo el día atenta a lo que mi papá necesitara ya que algunos días le hacían muchos procedimientos. Mi papá quería que siguiera trabajando para poder ahorrar dinero para nuestra casa ya que hemos estado pagando renta por más de 30 años, y me dijo que estaría bien. Sin embargo, su salud era una prioridad para mi hermanito de siete años, mi hermanito de dos años y para mí, e ir a trabajar sin saber qué podría pasarle me inquietaba y preocupaba aún más. A mi papá le fue bastante bien durante algunas semanas y comenzó a estabilizarse un poco. No estaba haciendo demasiado bien, ni demasiado mal. Sin embargo, las cosas empeoraron y lo hicieron muy rápido. Mi papá comenzó a toser mucho una noche y le dio mucha fiebre. Llevaron a mi papá a que le hicieran una radiografía de los pulmones y dijeron que tenía algunos signos de neumonía necrosante en ambos pulmones y que podría necesitar ser intubado si su respiración empeoraba. En unas pocas horas, su oxígeno comenzó a disminuir y lo llevaron de urgencia a la ICU para que lo pusieran en una máquina para respirar. Nos dijeron que la neumonía que tenía podría ser muy fatal y que sería muy poco probable que pudiera salir adelante, incluso con todos los antibióticos de amplio espectro que le darían porque la bacteria se estaba comiendo sus pulmones. Dos días después de ser intubado, mi papá falleció. Luchó mucho durante sus últimos días, y agradezco a Dios por permitirme crecer con un padre tan bueno y ejemplar a mi lado. Todos los días no están garantizados y debemos disfrutar cada segundo con nuestros seres queridos porque nunca sabemos la última vez que podremos hablar con ellos o volver a verlos. Mi padre nunca fue alguien que nunca estuvo enfermo y nunca estuvo acostumbrado a estar en el hospital; esta fue su primera vez en sus cuarenta y cinco años de vida. Mi papá tenía más de treinta años desde la última vez que regresó a su ciudad natal, El Alberto, Hidalgo, México, y nunca había visto a ninguno de sus padres desde que llegó a Las Vegas a la edad de quince años. Falleció en el hospital de Mountain View el 18 de septiembre de 2022 a las 10:09 am. Era padre de cuatro hijos y esposo. Mi padre era muy conocido por su buen corazón y por lo mucho que amaba a su familia, amigos y clientes. Era respetuoso, amable, genuino, trabajador, amable, cariñoso, y nunca lo verías enojarse por la razón que fuera. Siempre llevaba una sonrisa y era una persona muy alegre. Si llegaras a conocer a mi papá, él era alguien que daría un ejemplo de buenas virtudes. Aunque todos queríamos que mi papá siguiera aquí, sabemos que los planes de Dios son perfectos y que hace todo por una razón. Todas las donaciones son muy apreciadas si puede hacerlo. Y cualquier cantidad no es demasiado pequeña, ya que ayudará a cubrir el costo del funeral y el memorial. Estamos muy agradecidos por cada donación durante este momento difícil. Un versículo de la Biblia que se parece a los últimos días de mi papá aquí en la tierra con nosotros es "He peleado la buena batalla, he terminado la carrera, he guardado la fe". 2 Timoteo 4:7

My father, Carlos Reyes Garcia, was diagnosed with liver and kidney failure when admitted to the hospital on August 11, 2022. They would tell us that there was a slight chance he could improve with the medications they gave him, but there was also a chance that he would not and would only have a few months to live. The doctors basically told us it was like a coinflip, and only god knew if my dad would recover and he would be back to normal. They would draw blood and gather labs several times a day and every day when he was at the hospital to monitor his health. During the several days that god had permitted him to live, my dad kept his faith strong no matter the afflictions he had to endure. He wouldn't lose hope, even with his prognosis not looking too good. I was with my dad throughout the entirety of his first and last day at the hospital. I would never leave my father alone because I didn't want him to feel lonely in these difficult times, and I knew he would love to be accompanied on this journey from god. I would make sure my dad understood what the doctors had to say, what medicine would be administered and for what reason, what procedure may have to be done, and their overall plan for him every day. I would ensure my dad got enough sleep, helped him get up to use the restroom, helped him get his daily physical therapy, and helped feed him his breakfast, dinner, and lunch. I was by his side in every single hemodialysis procedure he had in the hospital to ensure it went smoothly, ensured he followed his daily one-liter water restriction, translated everything he wasn't sure about, and helped him get answer's to question's he had. There were numerous days in the hospital when I went days without sleeping because I would be attentive all day for whatever my dad needed since some days he had a lot of procedures done on him. My dad wanted me to continue to work to be able to save money for our house since we have been paying rent for more than 30 years, and he told me that he would be okay. However, his health was a priority than money to my little seven-year-old brother, one-year-old grandson, four month old grandson, and me, and going to work unsure about what could happen to him made me be at unease and worried even more. My dad was doing fairly well for a few weeks and was starting to stabilize for a bit. He wasn't doing too good, nor doing too bad. However, things got worse and did so very fast. My dad started coughing a lot one night and formed a very bad fever. They took my dad to get an x-ray for his lungs, and they said he had some signs of necrotizing pneumonia in both lungs and might need to be intubated if his breathing was going to worsen. Within a few hours, his oxygen started declining, and he was rushed to the ICU to be put on a machine for breathing. They told us that the pneumonia he had got could be very fatal and would be very unlikely that he would make it out, even with all the broad-spectrum antibiotics they would give him that the bacteria was eating his lungs. Two days after being intubated, my dad passed away. He fought so hard during his last days, and I thank god for allowing me to grow up with such a good father by my side. Every day is not guaranteed and we to enjoy every second with our loved ones becuase we never know the last time we will get to talk them or see them again. My father was someone who was never sick and was never used to being in the hospital; this was his first time ever in his forty-five years of life. My dad had more than thirty years since the last time he returned to his hometown, El Alberto, Hidalgo, Mexico, and he had never got to see either of his parents ever since he came to Las Vegas at the age of fifteen. He passed away in Mountain View hospital on September 18, 2022, at 10:09 am. He was a father of four kids and a husband. My father was very well known for his good heart and for how much he loved his family, friends, and clients. He was respectful, kind, genuine, hardworking, friendly, caring, and you would never see him get mad for whatver reason. He would always carry a smile and was such a joyful person. If you got to know my dad, he was someone that would set an example of good virtues. Although we all wanted my dad to still be here, we know that God's plans are perfect, and he does everything for a reason. All donations are greatly appreciated if you're able to do so. And any amount is not too small as it will help cover the funeral and memorial cost. We are so grateful for every donation during this difficult time. A verse from the bible that resembled my dad's last days here on earth with us is “I have fought the good fight, I have finished the race, I have kept the faith.” 2 Timothy 4:7