Tu Apoyo, Mi Oportunidad

Hola, soy Jennyfer Marín.

Un viernes 3 de mayo de 2019, a las 8:00 a.m., iba rumbo a mi trabajo, como todos los días. Me estacioné en un sitio de taxis para recoger a una compañera, ya que ella no contaba con vehículo. Me bajé unos segundos para tomar una pastilla para la gastritis, y al intentar subirme nuevamente a mi carro, sentí un fuerte golpe en el lado izquierdo, lo que me hizo caer al suelo. Al voltear hacia mi derecha, vi el cofre de un pickup volteado de lado. Había sido atropellada por una persona que, al parecer, tomó una mala decisión al manejar en estado de ebriedad y, posteriormente, se dio a la fuga dejándome tirada en el lugar.

Logré gritarle a mi compañera, quien, temblando, se acercó rápidamente. Le pedí que tomara mi teléfono y llamé a mi papá. Él se comunicó con mi hermano, quien llegó al lugar a los pocos minutos. Mi hermano llamó a la ambulancia, pero lamentablemente tardaron una hora en llegar. Durante ese tiempo, me desangré y caí en un choque hipovolémico.

A raíz del accidente, pasé por 13 cirugías debido a las graves lesiones que sufrí: fractura expuesta de pelvis, fémur bilateral y tibia expuesta. Mi vida y mis piernas estuvieron en grave riesgo, pero gracias a Dios logré sobrevivir.

Hoy me encuentro enfrentando una nueva batalla. Necesito con urgencia dos cirugías, una de ellas debido a una infección en una de mis piernas, que pone en peligro mi salud. Si no se controla, la infección podría agravar la situación, incluso llevándome a perder la pierna o a que la infección se propague a otras partes de mi cuerpo.

Es por eso que, con mucha humildad, me veo en la necesidad de solicitar su apoyo, tanto económico como en sus oraciones. Sé que estoy en las manos de Dios, mi Creador, quien tiene un plan para mi vida, un plan hecho por y para Él. A pesar de las pruebas, confío plenamente en Su poder, y mi deseo es ser un testimonio de que Él es un Dios de lo imposible. Cuando los médicos y la ciencia dicen "no", Él responde con un "sí" rotundo.

Agradezco profundamente cualquier ayuda que puedan brindarme en este momento tan difícil.

Que Dios los bendiga abundantemente.