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Fundación Paulo César Ibarra

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Amigos, 

Quisiera comunicarles una historia delicada sobre un gran amigo que muchos estiman por la gran persona que es y por su gran motivación por vivir y continuar en el camino del amor con su gran esposa Roció.

Por favor tómense el tiempo de leer esta carta, escrita por Roció, y de orar por Paulo y su familia en estos tiempos tan difíciles. Como todos saben, estas situaciones son muy difíciles en cuestión económica y desafortunadamente esta la única vía para que Paulo continúe con su tratamiento y siga su camino que apenas empieza.  Toda donacion será extremadamente grata y nunca olvidada. Gracias por tomarse el tiempo de leer esta triste carta…


Todo empezó desde agosto de 2018.  La salud de Paulo empezaba a deteriorarse reflejándose en perdida de peso, problemas de estómago y articulaciones principalmente. Visitamos doctores a lo cual le decían que era una infección de estómago. En momentos mejoraba y en otros recaía enfermándose constantemente al comer cualquier cosa.  Se mantuvo estable sin estar bien del todo durante algunos meses. En diciembre de 2018 su doctor le mandó a hacer análisis clínicos desde ahí lo recetaban según lo que fuera saliendo, manteniéndose, pero sin llegar a una mejoría considerable. En marzo de 2019 nuevamente se realiza otros exámenes, y esta vez el diagnostico fue presión alta, y problemas en riñones principalmente. 

Lo grave empezó las primeras semanas de abril, de repente empezaron las temperaturas de casi 40 grados, escalofríos, diarrea durante algunos días, al acudir con doctores e incluso de su trabajo lo llevaron a la cruz verde el diagnostico fue infección estomacal, y deshidratación, durante esa semana tomo el medicamento, sin embargo, no había mucha mejoría. El 14 de abril fue cuando al estar en casa, y al momento de querer levantarse perdió fuerzas y ya no pudo. Lo llevamos a urgencias, y de ahí decidieron trasladarlo al Seguro Social ya que presentaba una baja de sangre considerable, por un posible sangrado interno. A su ingreso se detecta con anemia, lesión renal aguda, trombocitopenia severa. En un principio los doctores no daban buenas esperanzas de vida debió a los niveles y daño en algunos órganos que presentaba, sin embargo, con los antibióticos, y transfusiones de sangre mejoró en algunos aspectos. Referente a los exámenes realizados para el tema de su estómago el diagnostico fue una enfermedad diverticular de colon no complicada.  Fue dado de alta como a las 3 semanas.

Una vez fuera del hospital los problemas con su estómago seguían, nunca toleró bien los alimentos, y continuaba con evacuaciones liquidas, los doctores argumentando que era un proceso normal debido a que se necesitaba poblar nuevamente su flora intestinal. Después de casi un mes el 25 de mayo nuevamente recae, pero esta vez lo llevamos a un hospital privado, de inmediato le hicieron varios exámenes y el diagnostico fue diverticulitis aguda severa complicada con obstrucción intestinal, sangrado colorrectal, focos de infección pulmonar, anemia, desnutrición, desequilibrio hidro electrolítico.  Debido a esto le realizan una resección intestinal 40 cm de intestino, y apéndice en la misma cirugía.  Durante la estancia en el hospital después de la cirugía su nutrición fue parenteral total.  Después de 17 días fue dado de alta, sus análisis ya presentaban niveles óptimos para su alta.

Nuevamente continuaron las evacuaciones liquidas, los alimentos eran poco tolerados, y  la teoría de que tanto antibiótico barrio la flora intestinal, y mientras se poblaba era normal. Durante su salida hubo días que parecía recuperarse, y otros que recaía.

El 18 de julio nuevamente es hospitalizado, y debido a que llega con presión baja, taquicardias, lesión en riñones, diarrea aguda, entre otras cosas es ingresado a terapia intensiva, desde su ingreso al hospital se le han realizado diversos exámenes dando positivo a una bacteria llamada Clostridium difficile, a el día de hoy la bacteria va cediendo, sus riñones y demás niveles nuevamente han mejorado. En cuanto a su intestino se sospecha una colitis ulcerativa crónica inespecífica (CUCI). Se ha intentado la alimentación con sólidos vía oral sin éxito. Actualmente es nutrido únicamente vía parenteral. Por el momento no es posible realizar ciertos estudios hasta que la inflamación de su intestino se estabilice. Paulo continua con cuidados generales hasta observar ausencia de inflamación intestinal, tolerancia a los alimentos, disminución de diarreas, y edemas.

Desde que Paulo fue hospitalizado en abril de 2019 nuestras vidas dieron un gran cambio, hemos estado de hospital en hospital, únicamente se nota mejoría por unos días en cuanto lo dan de alta, y nuevamente recae. Yo continúo trabajando, pero teniendo que dejar de ir a la oficina y demás actividades debido a que no le es posible valerse por sí mismo. 

Ha sido una situación difícil de mucho estrés, cansancio físico y emocional, sin embargo, no perdemos el ánimo ni la fe. Esperando pronto poder volver a nuestras actividades, y sobre todo que Paulo vuelva a sonreír, y pueda tener una buena calidad de vida disfrutando como antes lo hacía.
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