Help hungry children in Venezuela!
Donation protected
(para español ver abajo)
No child should grow up hungry! No child should die of malnutrition!
Stefany lived in Parroquia San Martín de Porres, Ciudad Guayana, she was two but looked eight months old, her skin was dried out, her arms skinny. She died in August. Her sister says that the family eats, what little they can find, only once a day. “When my belly and my head hurt cos I’m hungry, what I do is go to sleep”, she says.
A pale nine year-old girl fainted in front of her class, she had not eaten anything that day, and maybe not the day before either. In her school, cases of malnutrition have gone from 43 to 98 in a month. “We think that around 70% of the students struggle to get fed,” says the head teacher.
More and more frequently children in Venezuela are fainting in class or not going to school because they are too weak; they have not eaten. Many abandon school to help earn money for their families. Many mothers are filling their babies’ bottles with water and rice or cassava to ‘cheat hunger’; they cannot find milk. Parents are crying at night because they could not feed their kids. People looking for food in bins has become a regular and heartbreaking sight in cities around the country. Adults and children are rapidly losing weight, children are dying of malnutrition or illnesses associated with it.
Hunger has entered many homes and now dwells there.
How can we remain indifferent?
Who are we?
After listening to these stories, a group of Venezuelan friends got together. Our hearts hurt, we are filled with pain and rage. For days we couldn’t sleep. We felt impelled to act, to do something. We came up with the idea of raising funds to support projects that help people in poor ‘barrios’ (shanty towns) in Venezuela to feed their kids. Projects that could go some way to saving lives, to stopping the anguish of nights with empty stomachs, the pain of hungry children missing school or working on the streets, struggling like adults in a disfigured world.
We called our project Meals4hope.
The dream – the projects
Some people in the poorest areas struggle to survive but have started to work together in solidarity to help each other and help feed the children in their communities. In spite of their dehumanizing poverty, they dare to dream. We want to join them and invite you to do the same:
- In Parroquia San Martín de Porres, Ciudad Guayana, where baby Stefany lived, a group of local volunteers, supported by a doctor who gives her time freely, monitor the weight and size of infants who are in danger of malnutrition, and try to treat those in need.
We want to enable the team to monitor 200 children a month, and to help them begin production of a nutritious baby porridge developed by a local chemist, to feed to those found to be malnourished – an estimated 40 children per month.
- In Barrio Brisas del Sur, Ciudad Guayana, in response to the very high rate of school absence due to hunger and fatigue, a provisional school canteen was set up two years ago with the support of Me diste de Comer Foundation. Five women volunteers take it in turns to run the canteen.
We want to double the number of children who can eat at the canteen to 80; to guarantee a nutritious menu based on recipes designed by two volunteer chefs; and to start a community garden to grow food for the canteen and local families.
- Barrio Villa Esperanza, Anzoátegui, is a community living in extreme poverty. As a direct response to the critical situation, with funds collected, a group of volunteers will provide food parcels to 40 families with children under seven. The food provided will ensure a proper balance of proteins, fats and carbohydrates and will be sourced from local contacts. Community and family gardens will be started and training provided so that people can produce compost and grow some of their own food.
Meals and hope for children with our contribution
These projects are seeds sown against hunger. They are seeds for the future. They will benefit over 300 children directly. These seeds will grow if we nurture and water them. Together we can do so much!
Meals4hope is 100% voluntarily run. All of the funds received will be invested directly in the community projects outlined. We will keep supporters updated on the progress and the impact of the projects.
Every bit raised will make a huge contribution to tackling child hunger and malnutrition, and bring hope to children in need.
Hungry children in Venezuela need our help!
Please help us help these children and their communities.
Please do share this widely -
Thanks for your contribution!
...........
You can follow us on:
Facebook: meals4hope
Twitter: @meals4hope
or contact us at: [email redacted]
........
¡Combatir el hambre es tarea de todos!
Ningún niño debería pasar hambre, irse a la cama en las noches sin haber comido, ninguno debería morir por desnutrición. Sin embargo, eso es por lo que están pasando cientos de miles de niños y niñas en Venezuela hoy.
Stefany vivía en la Parroquia San Martín de Porres, tenía dos años pero parecía una bebé de ocho meses, su piel estaba seca, sus bracitos y piernas delgados. En agosto, Stefany murió de desnutrición. Su hermana cuenta que con lo poco que encuentran para comer, ella y sus hermanos comen una vez al día. “Cuando me duele la barriga y la cabeza por el hambre, lo que hago es acostarme a dormir”, dice.
Una pálida niña de nueve años se desmayó en clase. No había comido nada ese día, quizás tampoco el día anterior. En su escuela, casi a diario se desmaya un niño; los casos de desnutrición han pasado de 43 a 98 en apenas un mes. “Tenemos sospechas de que 70% de la comunidad estudiantil presenta problemas para alimentarse”, comenta una maestra.
En Venezuela cada vez más niños se desmayan en clase o dejan de ir a la escuela porque están demasiado débiles – no han comido, no tienen qué comer. Otros abandonan sus estudios para tratar de ganar dinero y ayudar a sus familias. Hay madres dando teteros de agua con arroz o yuca a sus bebés tratando de engañar al hambre - no encuentran leche para darles. Hay padres que lloran por las noches porque no pudieron darle de comer a sus hijos. Gente hurgando los basureros buscando comida se ha convertido en una dolorosa imagen cada vez más común en las ciudades. Adultos y niños pierden peso rápidamente. Hay niños, en todo el país, muriendo de desnutrición o enfermedades asociadas a ella. Los estómagos vacíos se expanden como epidemia. El hambre ha llegado a muchos hogares venezolanos y se ha instalado en ellos.
Oyendo estas historias, un grupo de venezolanos amigos nos reunimos. Esta realidad nos llenaba, nos llena, de dolor, de frustración, de rabia. Nos duele el alma. Queríamos hacer algo. De ahi nació la idea de recoger fondos para apoyar proyectos de alimentación de niños en barrios de extrema pobreza. Proyectos que pueden salvar vidas, eliminar la angustia de noches con barrigas vacías, evitar que niños abandonen la escuela y trabajen como adultos en la calle en un mundo que ha perdido humanidad.
Al projecto lo llamamos Meals4hope – alimentos de esperanza.
Los proyectos:
A pesar de la extrema pobreza en que viven, alguna gente en los barrios, madres, maestros, voluntarios, trabajan juntos, en solidaridad, buscando sobrevivir y brindar alimentos, esperanza y un mejor futuro para los niños más necesitados y sus familias. Se atreven a soñar. Nosotros queremos unirnos y apoyar para que esos sueños de niños sonriendo sin hambre, se hagan realidad, y te invitamos a que tú también los apoyes:
- En la Parroquia San Martín de Porres, donde vivía Stefany, un grupo de mujeres voluntarias de SAPAGUA, apoyadas por una doctora también voluntaria, monitorean el peso y talla de niños de la comunidad en peligro de desnutrición e intentan ayudar a quienes lo necesitan. Desde Meals4hope queremos apoyar al equipo a monitorear a 200 niños al mes; instalar una línea de producción de una papilla nutritiva y terapeutica para suministrarla a los niños desnutridos o con riesgo de desnutrición – se atenderían unos 40 niños al mes.
- En la escuela Iqbal Masis del barrio Brisas del Sur el ausentismo escolar aumentaba aceleradamente. Los niños no iban a clase porque no tenían qué comer. Como respuesta a esta situación se habilitó, hace dos años, gracias a la Fundación Me Diste de Comer, quien suministra asesoría e insumos, un comedor atendido por madres voluntarias. El apoyo busca duplicar el número de niños atendidos en el comedor, incrementándolo de 40 a 80 niños, garantizando un menú nutritivo, basado en un banco de recetas elaborado por dos chefs voluntarios. El proyecto también busca impulsar un huerto comunitario que suministre insumos para el comedor y las familias de la zona.
- La comunidad del barrio Villa Esperanza vive en extrema pobreza. Como respuesta a la situación de hambre generalizada, con el apoyo de los aportes recogidos, un grupo de voluntarios de la Fundación Punto Ecológico entregará bolsas de comida a los niños menores de siete años. Se busca asegurar una alimentación balanceada a los más vulnerables. Se impulsarán huertos comunitarios y familiares para que la gente produzca abono, leguminosas, verduras y frutas que apoyen su alimentación.
Estos proyectos son semillas de esperanza contra el hambre. Semillas de futuro que beneficiarán drectamente a 300 niños y niñas. Estas semillas crecerán con el aporte de cada uno de nosotros. Te necesitamos. Juntos podemos hacer muchas cosas.
Los miembros del equipo de Meals4hope trabajamos 100% de forma voluntaria. Todos los fondos recogidos se invertirán directamente en los proyectos descritos. Estaremos informando a los colaboradores y donantes sobre el progreso y los resultados de los proyectos.
Con muy poco, podemos hacer una gran diferencia en la vida de estos niños. Cada colaboración, por pequeña que sea, ayudará a combatir el hambre y la desnutrición y sembrará esperanzas en comunidades pobres.
Por favor pasa la información a tus amigos y amigas, motívalos a donar por esta causa que es de todos
¡¡GRACIAS!!
Si quieres colaborar en Bolívares, envianos un correo para pedir información de como hacerlo. ¡Gracias!
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Twitter: @meals4hope
o contactarnos: [email redacted]
No child should grow up hungry! No child should die of malnutrition!
Stefany lived in Parroquia San Martín de Porres, Ciudad Guayana, she was two but looked eight months old, her skin was dried out, her arms skinny. She died in August. Her sister says that the family eats, what little they can find, only once a day. “When my belly and my head hurt cos I’m hungry, what I do is go to sleep”, she says.
A pale nine year-old girl fainted in front of her class, she had not eaten anything that day, and maybe not the day before either. In her school, cases of malnutrition have gone from 43 to 98 in a month. “We think that around 70% of the students struggle to get fed,” says the head teacher.
More and more frequently children in Venezuela are fainting in class or not going to school because they are too weak; they have not eaten. Many abandon school to help earn money for their families. Many mothers are filling their babies’ bottles with water and rice or cassava to ‘cheat hunger’; they cannot find milk. Parents are crying at night because they could not feed their kids. People looking for food in bins has become a regular and heartbreaking sight in cities around the country. Adults and children are rapidly losing weight, children are dying of malnutrition or illnesses associated with it.
Hunger has entered many homes and now dwells there.
How can we remain indifferent?
Who are we?
After listening to these stories, a group of Venezuelan friends got together. Our hearts hurt, we are filled with pain and rage. For days we couldn’t sleep. We felt impelled to act, to do something. We came up with the idea of raising funds to support projects that help people in poor ‘barrios’ (shanty towns) in Venezuela to feed their kids. Projects that could go some way to saving lives, to stopping the anguish of nights with empty stomachs, the pain of hungry children missing school or working on the streets, struggling like adults in a disfigured world.
We called our project Meals4hope.
The dream – the projects
Some people in the poorest areas struggle to survive but have started to work together in solidarity to help each other and help feed the children in their communities. In spite of their dehumanizing poverty, they dare to dream. We want to join them and invite you to do the same:
- In Parroquia San Martín de Porres, Ciudad Guayana, where baby Stefany lived, a group of local volunteers, supported by a doctor who gives her time freely, monitor the weight and size of infants who are in danger of malnutrition, and try to treat those in need.
We want to enable the team to monitor 200 children a month, and to help them begin production of a nutritious baby porridge developed by a local chemist, to feed to those found to be malnourished – an estimated 40 children per month.
- In Barrio Brisas del Sur, Ciudad Guayana, in response to the very high rate of school absence due to hunger and fatigue, a provisional school canteen was set up two years ago with the support of Me diste de Comer Foundation. Five women volunteers take it in turns to run the canteen.
We want to double the number of children who can eat at the canteen to 80; to guarantee a nutritious menu based on recipes designed by two volunteer chefs; and to start a community garden to grow food for the canteen and local families.
- Barrio Villa Esperanza, Anzoátegui, is a community living in extreme poverty. As a direct response to the critical situation, with funds collected, a group of volunteers will provide food parcels to 40 families with children under seven. The food provided will ensure a proper balance of proteins, fats and carbohydrates and will be sourced from local contacts. Community and family gardens will be started and training provided so that people can produce compost and grow some of their own food.
Meals and hope for children with our contribution
These projects are seeds sown against hunger. They are seeds for the future. They will benefit over 300 children directly. These seeds will grow if we nurture and water them. Together we can do so much!
Meals4hope is 100% voluntarily run. All of the funds received will be invested directly in the community projects outlined. We will keep supporters updated on the progress and the impact of the projects.
Every bit raised will make a huge contribution to tackling child hunger and malnutrition, and bring hope to children in need.
Hungry children in Venezuela need our help!
Please help us help these children and their communities.
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Ningún niño debería pasar hambre, irse a la cama en las noches sin haber comido, ninguno debería morir por desnutrición. Sin embargo, eso es por lo que están pasando cientos de miles de niños y niñas en Venezuela hoy.
Stefany vivía en la Parroquia San Martín de Porres, tenía dos años pero parecía una bebé de ocho meses, su piel estaba seca, sus bracitos y piernas delgados. En agosto, Stefany murió de desnutrición. Su hermana cuenta que con lo poco que encuentran para comer, ella y sus hermanos comen una vez al día. “Cuando me duele la barriga y la cabeza por el hambre, lo que hago es acostarme a dormir”, dice.
Una pálida niña de nueve años se desmayó en clase. No había comido nada ese día, quizás tampoco el día anterior. En su escuela, casi a diario se desmaya un niño; los casos de desnutrición han pasado de 43 a 98 en apenas un mes. “Tenemos sospechas de que 70% de la comunidad estudiantil presenta problemas para alimentarse”, comenta una maestra.
En Venezuela cada vez más niños se desmayan en clase o dejan de ir a la escuela porque están demasiado débiles – no han comido, no tienen qué comer. Otros abandonan sus estudios para tratar de ganar dinero y ayudar a sus familias. Hay madres dando teteros de agua con arroz o yuca a sus bebés tratando de engañar al hambre - no encuentran leche para darles. Hay padres que lloran por las noches porque no pudieron darle de comer a sus hijos. Gente hurgando los basureros buscando comida se ha convertido en una dolorosa imagen cada vez más común en las ciudades. Adultos y niños pierden peso rápidamente. Hay niños, en todo el país, muriendo de desnutrición o enfermedades asociadas a ella. Los estómagos vacíos se expanden como epidemia. El hambre ha llegado a muchos hogares venezolanos y se ha instalado en ellos.
Oyendo estas historias, un grupo de venezolanos amigos nos reunimos. Esta realidad nos llenaba, nos llena, de dolor, de frustración, de rabia. Nos duele el alma. Queríamos hacer algo. De ahi nació la idea de recoger fondos para apoyar proyectos de alimentación de niños en barrios de extrema pobreza. Proyectos que pueden salvar vidas, eliminar la angustia de noches con barrigas vacías, evitar que niños abandonen la escuela y trabajen como adultos en la calle en un mundo que ha perdido humanidad.
Al projecto lo llamamos Meals4hope – alimentos de esperanza.
Los proyectos:
A pesar de la extrema pobreza en que viven, alguna gente en los barrios, madres, maestros, voluntarios, trabajan juntos, en solidaridad, buscando sobrevivir y brindar alimentos, esperanza y un mejor futuro para los niños más necesitados y sus familias. Se atreven a soñar. Nosotros queremos unirnos y apoyar para que esos sueños de niños sonriendo sin hambre, se hagan realidad, y te invitamos a que tú también los apoyes:
- En la Parroquia San Martín de Porres, donde vivía Stefany, un grupo de mujeres voluntarias de SAPAGUA, apoyadas por una doctora también voluntaria, monitorean el peso y talla de niños de la comunidad en peligro de desnutrición e intentan ayudar a quienes lo necesitan. Desde Meals4hope queremos apoyar al equipo a monitorear a 200 niños al mes; instalar una línea de producción de una papilla nutritiva y terapeutica para suministrarla a los niños desnutridos o con riesgo de desnutrición – se atenderían unos 40 niños al mes.
- En la escuela Iqbal Masis del barrio Brisas del Sur el ausentismo escolar aumentaba aceleradamente. Los niños no iban a clase porque no tenían qué comer. Como respuesta a esta situación se habilitó, hace dos años, gracias a la Fundación Me Diste de Comer, quien suministra asesoría e insumos, un comedor atendido por madres voluntarias. El apoyo busca duplicar el número de niños atendidos en el comedor, incrementándolo de 40 a 80 niños, garantizando un menú nutritivo, basado en un banco de recetas elaborado por dos chefs voluntarios. El proyecto también busca impulsar un huerto comunitario que suministre insumos para el comedor y las familias de la zona.
- La comunidad del barrio Villa Esperanza vive en extrema pobreza. Como respuesta a la situación de hambre generalizada, con el apoyo de los aportes recogidos, un grupo de voluntarios de la Fundación Punto Ecológico entregará bolsas de comida a los niños menores de siete años. Se busca asegurar una alimentación balanceada a los más vulnerables. Se impulsarán huertos comunitarios y familiares para que la gente produzca abono, leguminosas, verduras y frutas que apoyen su alimentación.
Estos proyectos son semillas de esperanza contra el hambre. Semillas de futuro que beneficiarán drectamente a 300 niños y niñas. Estas semillas crecerán con el aporte de cada uno de nosotros. Te necesitamos. Juntos podemos hacer muchas cosas.
Los miembros del equipo de Meals4hope trabajamos 100% de forma voluntaria. Todos los fondos recogidos se invertirán directamente en los proyectos descritos. Estaremos informando a los colaboradores y donantes sobre el progreso y los resultados de los proyectos.
Con muy poco, podemos hacer una gran diferencia en la vida de estos niños. Cada colaboración, por pequeña que sea, ayudará a combatir el hambre y la desnutrición y sembrará esperanzas en comunidades pobres.
Por favor pasa la información a tus amigos y amigas, motívalos a donar por esta causa que es de todos
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