Surviving breast cancer in Venezuela
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My aunt Alicia Beatriz Montes de Oca and her daughter Mairym Marquez were both diagnosed with breast cancer in the past year. It's been a long road for my aunt and the journey is only starting for my cousin. And we really need your help.
My aunt was diagnosed with invasive ductal adenocarcinoma in 2019. She has undergone multiple rounds of chemotherapy and finally (after COVID-19 related delays) she had a successful mastectomy in early October 2020. She has now been declared "cancer free", but she's not done. She still needs to have more tests done and must undergo both radiotherapy and chemotherapy as well as take medication and have periodic surveillance for several years.
My cousin was diagnosed with triple negative breast cancer in June 2020. Her fight against cancer is only beginning.
The situation in Venezuela is difficult in so many ways, the cost of living has increased exponentially and unfortunately wages are not enough for the most basic of needs (the monthly minimum wage isn’t enough to buy a carton of eggs). With expensive medical costs on top of everything, it's been a struggle to keep up and they depend on support from family and friends outside the country.
The health system in Venezuela is different from the US in the sense that you have to pay for everything up front (labwork, biopsy, histology, chemotherapy, radiotherapy, doctor's visits) before it can actually happen. All costs are "in dollars" because the value of the Venezuelan Bolívar changes so much from day to day.
My family has tried their best to use the public health system to decrease costs, but so many things are simply not available in the public sector, so we're forced to rely on the very expensive private sector for certain essential needs. Unfortunately looking for the best prices and getting the money together can result in treatment delays (of course not counting waiting for availability of services and hoping everything doesn't shut down again because of COVID-19). Sadly we’ve run out of money and we’re desperate for help.
Any little bit that you can help with is so appreciated and I'm forever grateful for your kindness and generosity. They’re both fighting so hard to survive!
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Tanto mi tía Alicia Beatriz Montes de Oca como su hija Mairym Marquez fueron diagnosticadas con cáncer de mama en el último año. Ha sido un camino largo para mi tía y el viaje apenas comienza para mi prima. Y necesitamos tu ayuda.
Mi tía fue diagnosticada con adenocarcinoma ductal invasivo de mama en el 2019. Pasó por múltiples ciclos de quimioterapia y por fin (algo retrasado debido al COVID-19) tuvo una mastectomía exitosa a principios de octubre del 2020. Ya por fin ha sido declarada “libre de cáncer”, pero no ha terminado. Todavía se tiene que hacer más exámenes y luego le toca radioterapia y más quimioterapia, tomar medicamentos y hacerse exámenes periódicamente durante varios años.
Mi prima fue diagnosticada con cáncer de mama triple negativo en junio del 2020. Su lucha acaba de comenzar.
La situación en Venezuela es dura en tantos sentidos, el costo de vida ha incrementado exponencialmente y lamentablemente el sueldo no alcanza para cubrir las necesidades más básicas. Con gastos médicos encima de todo, ha sido difícil cubrirlo todo y ellas dependen del apoyo de familiares y amigos fuera del país.
El sistema de salud en Venezuela es diferente del de los Estados Unidos en el sentido de que hay que pagar los servicios por adelantado (laboratorio, biopsia, histología, quimioterapia, radioterapia, visitas médicas). Todos los costos son “en dólares” porque el valor del Bolívar varía tanto de un día para el otro.
Mi familia ha hecho todo lo puede para aprovechar los recursos del sistema de salud pública para disminuir costos en lo posible, pero muchas cosas simplemente no están disponibles en el sector público y nos vemos obligados a depender de un sistema privado que es muy costoso. Desafortunadamente buscar los mejores precios y reunir el dinero necesario puede resultar en retrasos en el tratamiento (sin contar esperar disponibilidad de servicios y tener la esperanza de que COVID-19 no haga que todo cierre de nuevo). Lamentablemente nos quedamos sin dinero y nos encontramos desesperados.
Cada pequeña contribución vale muchísimo y siempre estaré agradecida por su bondad y generosidad. ¡Ambas quieren vivir y salir de esta situación tan delicada!
My aunt was diagnosed with invasive ductal adenocarcinoma in 2019. She has undergone multiple rounds of chemotherapy and finally (after COVID-19 related delays) she had a successful mastectomy in early October 2020. She has now been declared "cancer free", but she's not done. She still needs to have more tests done and must undergo both radiotherapy and chemotherapy as well as take medication and have periodic surveillance for several years.
My cousin was diagnosed with triple negative breast cancer in June 2020. Her fight against cancer is only beginning.
The situation in Venezuela is difficult in so many ways, the cost of living has increased exponentially and unfortunately wages are not enough for the most basic of needs (the monthly minimum wage isn’t enough to buy a carton of eggs). With expensive medical costs on top of everything, it's been a struggle to keep up and they depend on support from family and friends outside the country.
The health system in Venezuela is different from the US in the sense that you have to pay for everything up front (labwork, biopsy, histology, chemotherapy, radiotherapy, doctor's visits) before it can actually happen. All costs are "in dollars" because the value of the Venezuelan Bolívar changes so much from day to day.
My family has tried their best to use the public health system to decrease costs, but so many things are simply not available in the public sector, so we're forced to rely on the very expensive private sector for certain essential needs. Unfortunately looking for the best prices and getting the money together can result in treatment delays (of course not counting waiting for availability of services and hoping everything doesn't shut down again because of COVID-19). Sadly we’ve run out of money and we’re desperate for help.
Any little bit that you can help with is so appreciated and I'm forever grateful for your kindness and generosity. They’re both fighting so hard to survive!
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Tanto mi tía Alicia Beatriz Montes de Oca como su hija Mairym Marquez fueron diagnosticadas con cáncer de mama en el último año. Ha sido un camino largo para mi tía y el viaje apenas comienza para mi prima. Y necesitamos tu ayuda.
Mi tía fue diagnosticada con adenocarcinoma ductal invasivo de mama en el 2019. Pasó por múltiples ciclos de quimioterapia y por fin (algo retrasado debido al COVID-19) tuvo una mastectomía exitosa a principios de octubre del 2020. Ya por fin ha sido declarada “libre de cáncer”, pero no ha terminado. Todavía se tiene que hacer más exámenes y luego le toca radioterapia y más quimioterapia, tomar medicamentos y hacerse exámenes periódicamente durante varios años.
Mi prima fue diagnosticada con cáncer de mama triple negativo en junio del 2020. Su lucha acaba de comenzar.
La situación en Venezuela es dura en tantos sentidos, el costo de vida ha incrementado exponencialmente y lamentablemente el sueldo no alcanza para cubrir las necesidades más básicas. Con gastos médicos encima de todo, ha sido difícil cubrirlo todo y ellas dependen del apoyo de familiares y amigos fuera del país.
El sistema de salud en Venezuela es diferente del de los Estados Unidos en el sentido de que hay que pagar los servicios por adelantado (laboratorio, biopsia, histología, quimioterapia, radioterapia, visitas médicas). Todos los costos son “en dólares” porque el valor del Bolívar varía tanto de un día para el otro.
Mi familia ha hecho todo lo puede para aprovechar los recursos del sistema de salud pública para disminuir costos en lo posible, pero muchas cosas simplemente no están disponibles en el sector público y nos vemos obligados a depender de un sistema privado que es muy costoso. Desafortunadamente buscar los mejores precios y reunir el dinero necesario puede resultar en retrasos en el tratamiento (sin contar esperar disponibilidad de servicios y tener la esperanza de que COVID-19 no haga que todo cierre de nuevo). Lamentablemente nos quedamos sin dinero y nos encontramos desesperados.
Cada pequeña contribución vale muchísimo y siempre estaré agradecida por su bondad y generosidad. ¡Ambas quieren vivir y salir de esta situación tan delicada!
Organizer
Alicia McBride
Organizer
New York, NY
