Miguel Camacho's Accident

On June 20, 2018, I was the victim of a devastating accident which caused me to lose my right leg and much more.  While I was standing behind my car, a driver without a license hit me and pinned me between her car and my car.   This violent impact crushed and snapped my right leg off, fractured my left leg, and caused me serious and permanent spine injuries.  I also underwent neck surgery which requires me to have several pieces of metal in my cervical spine.  I could have been paralyzed.

I am now constrained to a wheelchair.   In one instant, my life changed drastically.  Not being able to walk again is beyond what I can accept or even comprehend.   When I look down, I see that my left leg gone and see a new reality.  This tragedy comes with humiliation, shame, and embarrassment.  Not being able to go to the bathroom by myself and having to depend on other people to do normal and everyday tasks has impacted my lifestyle very much.
While I am home today, I must depend on wheelchair ramps to go in and out of my own house and without the constant support of my family, I would not be able to do anything.

To make things worse, after the accident I began to suffer from near blindness (I can only see about 20%), glaucoma, and cataracts. The accident broke my glasses and up to this day I have not been able to get an ophthalmologist to come to these private facilities to provide me with an eye exam. 

Prior to my accident, I was an independent and healthy person.  I feel grateful for being alive today and feel like God has a purpose for me. My faith has grown stronger even though my circumstances are not the best, and far from ideal.

I believe that there are good people in this world that are willing to help those in need. I am now one of those people in need.  I hope this never happens to anyone else and hope my message will reach you and ask that you please help me “get back” on my two feet.

Thank you for your time and God bless you all.
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El día 20 de junio del 2018 yo fui victima de un accidente automovilístico, el cual me causo perder la pierna derecha, y mucho, mucho más.  Mientras estaba parado atrás de mi carro, una conductora sin licencia vino repentinamente y me atropello, dejándome atrapado entre su carro y el mío. Este impacto violento me aplasto y voló de mi cuerpo la pierna derecha, me fracturo la pierna izquierda, y me ha causado varias lesiones permanentes en la columna. También tuve cirugía del cuello, la cual me exige tener varios pedazos de metal en mi columna cervical. He podido quedarme paralizado.  

Ahora estoy constreñido a unasilla de ruedas. En un instante, mi vida cambio drásticamente. No poder volver a caminar es mucho mas de lo que puedo aceptar o comprender. Cuando miro hacia abajo veo que mi pierna izquierda no esta y me doy cuenta de mi nueva realidad. Esta tragedia viene con humillación y vergüenza, pues el no poder ir al baño yo mismo y tener que depender de otras personas para hacer cosas normales y diarias ha impactado mi vida mucho.

Aunque este en casa el día de hoy, debo depender de rampas de silla de ruedas para entrar y salir de mi hogar. Si no fuera por el constante apoyo de mi familia no podría lograr hacer nada. Para empeorar las cosas, después del accidente comencé a sufrir de ceguera completa (ahora solo puedo ver aproximadamente un 20%), glaucoma, y cataratas en los ojos. El accidente quebró mis lentes y hasta el día de hoy no he logrado que un oculista venga a darme una evaluación y un examen de vista, ya que estos especialistas no van a instituciones privadas.

Antes de mi accidente yo era una persona saludable e independiente. Me siento muy afortunado por estar vivo el día de hoy y siento que Dios tiene un propósito para mí. Mi fe ha crecido y se ha fortalecido a pesar de que mis circunstancias no son las mejores, y están muy lejos de ser ideales.
Creo que hay gente buena en este mundo que esta dispuesta a ayudar a los que están necesitándolo. Ahora yo soy una de esas personas. Desde el fondo de mi corazón espero que nunca le pase esto a nadie y espero que mi mensaje les llegue. Les pido que por favor me ayuden a volver a “levantarme”.

Gracias por tomarse el tiempo de leer y que Dios los bendiga.

Sincerely,

Miguel Angel Camacho Vasquez